Hoy es un día triste,
huele a lágrimas
y se saborea como el peor helado a solas.
Hoy no quise despertar pero igual sucedió,
no quise vestirme pero tuve que hacerlo,
no quería ver a nadie, pero apareció más de una vez mi madre en mi dormitorio.
Hoy es un día en el que me cuestiono mi existencia,
insisto en que no tengo instintos suicidas,
pero creo que mi inutilidad está llegando al más alto límite,
no tengo nada ni a nadie por quien continuar,
no tengo trabajo,
soy una mujer completamente indeseable,
y sigo enfrascada en casa de mis padres.
Hoy es uno de esos días
en que el sacar cuentas
me deja con un sabor amargo,
en el que por más esfuerzos que haga
me doy cuenta de lo mal que estoy
de lo poco que he conseguido
y de la vida que llevo.
Hoy leí por ahí "las cosas extraordinarias, solo le suceden a personas extraordinarias"
claramente no soy una de esas personas.
Suena: Pablo Milanés / Para vivir
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