domingo, 30 de enero de 2011

Y sigue aquí (esa sensación)


Han sido días de recordar esa odiosa negativa
y verme convertida en una masoquista dudando de mi misma,
de yo como mujer y de yo como una persona que se jactaba
de la capacidad para darse cuenta de como son los otros.

Le he dado vuelta a esa historia no contada,
me he puesto en el papel de víctima y victimaria
y he tratado de encontrar luces anteriores que no fui capaz de ver.

Han sido días de recordar,
con ansias por salvar una amistad
que inevitablemente maté,
de esperar por un abrazo furtivo,
con una broma de mal gusto o con esas conversaciones densas
que tanto me gustan.

Deseo volver el tiempo atrás, cerrar mi boca y matar esa ilusión
con otros besos, quisiera mantener esa amistad en alto por sobretodo
y no martirizarme cuando otras me cuentan de tu vida, quisiera
cuidarme de pasarla mal y cuidarte a ti de lo mismo.

Pero ya es tarde, ya no lo hice, no lo hicimos
y sigo acá remordiéndome por decirte la verdad
y por esa respuesta indeseada y dolorosa que me diste.

miércoles, 26 de enero de 2011

....


Ansío ver la cara de un hombre no menos miserable
que me enrostre su alegre bienestar
que me hable de los miles de orgasmos obtenidos
y de los gritos que ha podido dar a otra sin que esta se subleve.
Añoro que me hostigue visualmente,
que me sugiera encamarnos o simplemente,
me distraiga con sus banales historias,
que me hable de cuentas corrientes y de sueños materiales cumplidos.
Quisiera saber cuál es la fórmula para continuar
y de pasada descubrirme completa
para dejar esta sensación de castración tan asquerosa.
Quiero verte el rostro y algo más,
me he convertido en una repugnante masoquista

Verano Reguleque


Vino nuevamente a mí ese aire veraniego a tratar de salvar a este corazón desanimado y a maltraer por un larguísimo año.
De todas las miradas que el año anterior me enamoraron, encantaron, acompañaron, solo quedaba una y fue hermoso compartir nuevamente con ella, pero a la vez doloroso ver que las demás se esfumaron, por decisiones personales, por opciones, por su propio bienestar.
Me he desayunado con mucha información la que ha matado en mi la capacidad de asombro, ya no sé que creer ni en quien creer, me he defraudado y me he sentido más sola que nunca.
He visto miles de rostros a mi alrededor, pendejos, viejos, curas, hermanos, minas, cuáticas, lesbianas, homosexuales, embarazadas, he visto tantas miradas pasar al lado mío, pero sé que ninguna se quedará a hacerme compañía.
He hablado de resignación, he hablado de ilusión, pero ya no tengo idea de cuál es la óptima para mi vida un poco desgastada, para mi incredulidad en alza y para mi soledad arbitraria.
Vino el aire veraniego a desempolvar la historia de un año "reguleque".

jueves, 13 de enero de 2011

Esa sensación

Han sido días extraños, volví a pisar esos suelos con la convicción de que podría limpiar mi espíritu y que vendría la calma a mis días.

Fueron días de extrañar inmensamente esas sonrisas que el año anterior me dejaron revitalizada, de esperar palabras, gestos; fueron días en los que me di cuenta que hay personas que no quieren mi presencia cerca, fueron días de escuchar bromas acerca de mi cuerpo, mis años, mi vida, que no me dejaron muy bien, fue un revolver mis miedos y mis carencias y verme desnuda sin poder defenderme, eso fue mucho mas extraño.

No me había dado cuenta como han pasado los años, no me di cuenta como mis prioridades y la forma de ver la vida me dejó lejos de todos los que frecuento, que las personas me quieren como no me gusta, de manera utilitaria y transitoria.

En estos días Dios vino a mi encuentro, me miró de cerca, me abrazo y me acaricio el cabello. Dios está presente en esas sonrisas, en esas manos cargadas de cansancio, en esos años muy bien llevados, en esos niños y sus palabras inocentes, ahí está presente y con eso me quedo. Pero Dios me habló desde mi propia miseria y no quiero sentirme más así, sola, eternamente sola, enamorándome de personas a las que no les importo, viéndome perdida en mis sueños cuando mi piel se pone gélida y muere de a poco.

En estos días ha vuelto a mi esa sensación de que pasan los años, pasan las personas, pasa la vida y yo me quedo atrás de todo eso, esa sensación de perder el tiempo, de ser indeseable, de creer que hay cosas que no estám hechas para mí.