sábado, 17 de julio de 2010

Adiós queridos míos...

He llorado en silencio recordando a esas pequeñas caritas llorando por mi partida, me he entristecido por estar lejos al saber que este lunes no vuelvo a verlos y a escuchar un "Buenas tardes tía María José Muñoz Escobar" y verlos reír a escondidas por los que me decían Escoba.

Muero de nostalgia al saber que no tendré abrazos, no tendré reclamos por no dar besos, no habrán excusas por tareas no echas y no habrán colaciones en mis bolsillos, no habrá nadie colgando en mi espalda, ni colándose en la sala de profesores, no tendré llantos en mi delantal, ni abrazos grupales.

¡Cómo he aprendido a amarlos y cuán feliz me han hecho!

No hay comentarios: